Una maestra preescolar derribó un misil ruso durante un ataque masivo a Ucrania

En la mañana del 17 de noviembre, durante un ataque masivo ruso contra Ucrania, una ex maestra de jardín de infantes y ahora oficial militar, Natalia Grabarchuk, destruyó un misil crucero del complejo de misiles antiaéreos portátiles IGLA, informó la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

«¡Fue su primer lanzamiento de combate y su primer impacto!», se lee en el mensaje.

Natalia completó cursos de capacitación de cinco meses en el centro de capacitación y dominó varios tipos de sistemas portátiles de misiles antiaéreos.

«Cuando el misil enemigo apareció frente a mí, rechacé todas las emociones y excitaciones. Realicé cientos de entrenamientos en simuladores. Y aquí, ¡el primer combate y el objetivo!… El Sistema de defensa antiaérea portátil pesa unos 18 kilogramos, la responsabilidad también es apremiante. Estoy muy contenta de haberlo conseguido», afirmó la militar.

Natalia Grabarchuk en la vida civil era maestra de preescolar. Desde 2021 es artillera antiaérea de la unidad de misiles antiaéreos de la brigada de ingeniería de radio Galicia-Volinia del comando aéreo «Oeste».

Ya después del trabajo de combate, dio rienda suelta a sus emociones. Nuestro grupo de bomberos móvil está formado por mujeres militares. Estamos haciendo los máximos esfuerzos para lograr el resultado, estamos dando todas nuestras fuerzas», dijo Natalia.

Los rusos volvieron a atacar masivamente a Ucrania la noche del 17 de noviembre, utilizando drones de ataque, misiles de crucero y misiles aerobalísticos.

«El enemigo se enfrentó a 7 bombarderos estratégicos Tu-160 y 16 Tu-95MS, 2 bombarderos de largo alcance Tu-22M3, 5 cazabombarderos Su-34, 4 cazas Su-27, 10 cazas MiG-31K, 4 portaaviones alados para el ataque aéreo», escribió la Fuerza Aérea.

En total, los defensores ucranianos derribaron 144 objetivos aéreos: 102 misiles y 42 drones. La defensa aérea funcionó en casi todas las regiones de Ucrania: en Kyiv, Cherkasy, Kirovograd, Chernígiv, Sumy,
Járkiv, Poltava, Odesa, Mikoláiv, Zaporiyia, Dnipropetrovsk, Zhitómir, Vínnitsia, Jmelnitski, Ternópil, Ivano-Frankivsk, Rivne, Volinia y Lviv.

Se atacaron instalaciones energéticas, edificios residenciales y automóviles. Hay muertos y heridos. El suministro de electricidad y agua ha desaparecido en varias regiones.

«Hoy fue uno de los ataques rusos más grandes y peligrosos de toda la guerra. Doscientos diez drones y misiles a la vez, incluidos los hipersónicos y aerobalísticos. Afortunadamente, la mayoría de los objetivos fueron derribados. El objetivo de Rusia era la energía y las infraestructuras críticas. Y esta es la respuesta a todos aquellos que querían lograr algo con Putin a través de conversaciones, llamadas telefónicas, abrazos: la pacificación», afirmó el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

En la tarde del 17 de noviembre, Rusia también atacó Sumy con cohetes: los ocupantes apuntaban a un edificio de gran altura. Murieron 11 personas, incluidos dos niños. 84 personas resultaron heridas de diversa gravedad, 11 de ellas niños. Otras 11 personas, entre ellas seis niños, se encuentran en cuidados intensivos, informó la Administración Militar de Sumy.

Fotografía: Fuerza Aérea de la ZSU