Las promesas de paz de Putin son sólo un medio para intensificar la agresión contra Ucrania

El Congreso Mundial de los Ucranianos (CMU) condena enérgicamente la última ola de ataques rusos contra ciudades, infraestructura civil y sistemas energéticos vitales de Ucrania. Estos devastadores ataques contrastan marcadamente con las recientes declaraciones de paz de Vladimir Putin, incluidas las promesas que hizo durante una conversación telefónica con el Presidente estadounidense Donald Trump el 18 de marzo de 2025.

Apenas unas horas después de prometer suspender los ataques aéreos durante 30 días, Rusia lanzó un ataque coordinado contra Ucrania utilizando 150 drones, misiles balísticos y misiles antiaéreos. Este ataque causó daños importantes a la energía, los sistemas de transporte, los hospitales y las instalaciones civiles de Ucrania. Kyiv y otras ciudades fueron afectadas.

«Este descarado acto de agresión demuestra una vez más las verdaderas intenciones de Putin y la constante negación por parte del Kremlin del derecho internacional y los derechos humanos», afirmó el Presidente del CMU, Pavló Grod. «Las declaraciones de Putin no son más que una elaborada cortina de humo diseñada para ocultar el implacable curso de violencia y dominación de su régimen».

Grod también expresó su gratitud por los esfuerzos del Presidente Trump para mediar en las conversaciones de paz, pero advirtió contra las tácticas rusas: «Apreciamos el deseo de diplomacia, pero las llamadas conversaciones de Putin son sólo una estrategia para reagrupar fuerzas y lanzar un ataque aún más devastador contra Ucrania. La única respuesta a esta agresión es la fuerza decisiva».

El Congreso Mundial de los Ucranianos pide a Estados Unidos y a las democracias del mundo que apoyen firmemente a Ucrania. Fortalecer la defensa aérea de Ucrania y salvar vidas inocentes es una cuestión urgente. Al mismo tiempo, es necesario seguir presionando a Moscú con la ayuda de poderosas sanciones para que Rusia rinda cuentas y evite que cometa más crímenes.

El mundo debe estar alerta ante las promesas vacías de Rusia y tomar medidas decisivas para garantizar la justicia, la seguridad y una paz duradera para Ucrania y su pueblo.