
El encuentro entre el Presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y el Presidente estadounidense, Donald Trump, en Roma, en la ceremonia de despedida del Papa Francisco, se convirtió en una especie de regalo del pontífice al mundo.
La conversación entre políticos, que tuvo lugar en la Basílica de San Pedro, simbolizó otro posible paso hacia la paz, considera Boris Gudziak, Metropolitano de la Iglesia greco-católica ucraniana, Jefe de la Arquidiócesis de Filadelfia en EE.UU., escribe OSV News.
El papa Francisco está dando al mundo una bendición. Quizás no sea la última, pero sí una bendición en un momento en que las esperanzas de paz casi se han desvanecido, dijo Gudziak.
Un momento especialmente positivo es que Zelenski y Trump han reanudado la comunicación personal, considera el metropolitano.
“No me atrevo a predecir las consecuencias de esta conversación, pero es evidente que el Presidente Trump está empezando a comprender: [El presidente ruso] Vladimir Putin no está interesado en la paz. No ha abandonado sus intenciones originales y constantes de destruir Ucrania”, dijo el obispo Gudziak.
No se deben subestimar las circunstancias en las que se reunieron los presidentes, subraya el metropolitano.
“Son momentos que inspiran, señalan verdades profundas sobre la vida humana y llaman a la responsabilidad”, afirmó.
Fotografía: OSV News photo/Bob Roller